Me pudo aquella madrugada de invierno y mi efímero impulso quedó escondido entre los brillos dopados de la noche, de aquella noche tan inusualmente cálida y plagada de sensaciones de estío no esperado. El blanco de la luz cegó mi ser y me obligó a deambular por lustros de castigo arañado por merecidos sinsabores sintiendo el penetrar del vinagre en mis heridas. Cargo con una daga en el alma de la que tiro a diario intentando deshacer mis recuerdos, más me ahogo sin remedio entre los empellones del gentío que me ignora desconocedor de las lágrimas tragadas que inundan mi garganta.
Un alma amiga me dijo hace poco, “estás perdiendo voz”, y tenía razón, pierdo la voz que tiré un mal día con mi vida.
Si lo que has escrito refleja como estás entonces no me gusta nada verte así, me oyes? así que ya estás espabilando ;)
ResponderEliminarBesazos.
Hola ricardo tus letras me gustan mucho...Escribes muy lindo y expresas muchos sentimientos que se ahogan en tu voz pero que emergen en tus letras...Espero estes bien y que tu voz sea de jubilo cante de alegria junto a tu corazon...abrazosss
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